martes, 13 de febrero de 2007

CLEMENTE

Clemente camina desorientado sobre Santa Fe y Armenia .A esa altura se encontraban con igual cantidad de cuadras que recorrer para ir al trabajo o volver a su casa, aunque eran direcciones opuestas opuestos. Su mirada perdida denota que al pobre Clemente le hace falta algo en su vida , se siente inseguro por no tenerlo. Busca desesperado por sus bolsillo como si allí pudiese encontrarlo , el sabe que su día será mas difícil aun. Se le llega a notar la intención de querer detener a la gente que anda por aquellas mismas calles , para poder conseguir un poco de lo que el había perdido. En un momento pensó en volver a su casa, creyendo que lo encontraría ahí , aunque esto lo haría llegar tarde al trabajo. En ese mismo instante aparece un caballero .
¿Me convida con un cigarrillo? pregunto
Solo si usted me presta su encendedor
Y la mirada de Clemente vuelve a recuperar la calma .

4 comentarios:

Anónimo dijo...

tanta incertidumbre por saber qué era para que me digas que era algo que podría habérselo comprado por un peso en el kiosco. aparte me diste ganas de fumar un pucho, todo mal.

Fernando Travaglini dijo...

es genial el final. GENIAL. tene cuidado con los tiempos! (si me permitis que te corrija)

Carlos Diez dijo...

Si me he dado cuenta de mi problema con los tiempos, creo haberlo corregido. Gracias por la observacion

Unknown dijo...

Este realmente me gusto. Sera por k compartimos vicios.